sábado, 25 de enero de 2025
Yo prefiero a Abner Lloveras
Seré claro desde el principio. Yo prefiero a Abner Lloveras que a Ilia Topuria. No estoy diciendo que uno sea mejor que el otro en el ring. Estoy diciendo que, según lo que he visto en las distintas entrevistas (no conozco personalmente a ninguno de los dos), prefiero a Abner como peleador y como persona por varios motivos.
El primero simplemente por una reacción de piel, visceral, ante lo que me transmiten los dos cuando los veo en sus apariciones públicas. Si Abner parece un tipo normal, que te le puedes encontrar por la calle comprando el pan, Topuria lleva una pose de superestrella que no me la acabo de creer. Quizá tenga que ver con esa necesidad de proyectar una imagen de ganador de la que hace gala en sus declaraciones que no son más que una repetición del mantra de los coach de autoayuda que tanto proliferan estos días. Abner no te quiere vender nada y no se engaña (ni te engaña) diciéndote eso de si quieres puedes, si quieres puedes, si quieres puedes etc…porque hay muchos factores que no tienen que ver con tu esfuerzo personal y al final las loterías de la vida influyen mucho sobre dónde acaba cada cual.
El segundo es la motivación por la cual hacen lo que hacen. Abner comenta que a él le gusta pelear. Punto. Le gusta esa sensación al límite y de conocimiento de uno mismo. Si le pagan por eso, bien, que de algo hay que vivir. Pero el dinero nunca fue ni es un motor para hacer lo que hace y por eso sigue peleando pasados los 40 en cualquier tipo de formato, de MMA convencional a KOTS. Ilia parece que tiene todo mucho más programado desde el punto de vista de una carrera de deportista profesional. Piensa lo que quiere alcanzar e incluso cuando se va a retirar. Es decir, ¿le gusta pelear? Sí, pero parece que ese no sea el motor por lo que hace lo que hace y que la pasta, la fama y el estatus pesan mucho en sus decisiones. Nada que objetar desde ese punto de vista, pero a mí no me vale.
El tercero es por el tipo de posicionamiento político que defienden, de forma explícita o implícita. Topuria hace gala una españolidad a la derecha. Y no por el hecho de apodarse “El matador” que podría vinculare directamente a la España torera sino por esa actitud (quasi)servil antes los ricos y poderosos del país (a.k.a Florentino) de los que podrían formar parte todos los inmigrantes de bien y los miembros de la clase trabajadora honesta que así lo quisieran; él es ejemplo Rafa Nadal ascendiendo desde lo más bajo. Por su parte Abner ha mostrado siempre un posicionamiento político claro pero carente de fanatismo. Antifascista con conciencia de clase, independentista catalán con matices, sabe la realidad del entorno de su barrio y no pretende olvidarse ni esconder o maquillar su pasado ahora que parece gozar de algo de notoriedad en el mundillo de los deportes de combate.
El cuarto y último de los motivos tiene que ver con mi debilidad personal por los héroes anónimos y figuras olvidadas de la historia. Quiero decir, a pesar de la fascinación actual de la gente por el fenómeno Topuria en la UFC, Abner ha sido verdaderamente uno de los pioneros más relevantes de las MMA en nuestro país. Que cuando casi nadie sabía sobre el UFC, Abner fue a EEUU y participó en The Ultimate Fighter teniendo a McGregor de entrenador; que participó en otras ligas mayores de las MMA como M1 global o Bellator y que ha seguido peleando por todo el mundo hasta pasar en los últimos tiempos por KOTS, protagonizando una de las más épicas peleas de la compañía.
Como dije al principio, prefiero a Abner Lloveras que a Ilia Topuria. No es que cuando compiten cualquier de los dos no los apoye. Claro que lo hago. Lo único es que, si en el universo paralelo donde ocurren las cosas que en este ya no podrán ser se enfrentaran los dos, ya sabría a quién animar.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)